Bienvenida al Blog de Mrs. Eme (yo, la misma ^^)
Llevaba tiempo queriendo estrenar mi blog pero tengo la miserable manía de dejar los placeres (menos comer) para lo último…. ERROR. Así que ayer me prometí a mí misma colocarlos delante. Porque sí, porque se lo merecen, por hacerme feliz.
Hoy me apetece contaros cómo ha sido la aventura de crear mi marca, mi proyecto, mi idea. No sé ni cómo llamarlo, porque abarca tantos conceptos que todo se me queda corto, pero bueno, marca/proyecto es bien. Pues para qué engañaros, ha sido como hacer puénting de 1.00.000.000.000.000 metros. Todo el proceso de creación era cómo una caída al vacío constante. ¿Porqué? Porque yo tenía mi idea/proyecto redactada a limpio, pero materializarla supuso entrar en terreno desconocido (unknown, que suena mejor, jeje).
¿nombre? ¿logo? ¿registro de marca? ¿redes sociales? ¿web? ¿métodos de pago online? ¿proveedores? ¿programa para el control de stock? ¿fotografías? ¿empresa de transporte?
Etc. Etc. Etc.
Cuando empezaba a dominar una cosa, venía otra aún más ajena a mí. Quien me diría a mí, una abogada patosa en la era digital metiéndose en estos menesteres. Yo, que colgaba una foto en Instagram y no la volvía a mirar pasados 3 días. Yo, que no sabía ni que era un follower, ni un reels, ni el algoritmo de instagram (hasta hace dos días lo llamaba lagoritmo, sí, y me quedaba tan ancha…).
Pues sí. La magia de las ganas pudo con todo. Eso sí, tuve que buscar ayuda porque quería que fuera tal y como lo veía en mi cabeza. Si lo hacía yo sola sabía que el resultado sería el mismo que cuando compras algo en Aliexpress: EXPECATIVA TOP – REALIDAD FAIL (¿lo visualizáis? Eso que ocurre cuando a la modelo le queda como un guante, te lo compras, te llega a casa, te lo pruebas y pareces cualquier cosa menos la modelo de esa foto).
Así que lo primero que hice fue buscar el apoyo de mi marido/familia (mi padre era el más difícil de encandilar) y…voilá, ¡conseguido!
Segundo paso: buscar a alguien que tuviera toooodo el conocimiento digital que a mi me faltaba. Así fue como contacté con Nacho, nuestro diseñador web/informático, y con Adriana, la diseñadora gráfica. Ambos con una paciencia de camión. Porque hablar con una inepta digitalmente hablando, es una ardua tarea. Y más si encima es una perfeccionista-tocaovarios. Pues sí. Tienen el cielo ganado. Lo reconozco.
Tercer paso: buscar a alguien que entendiera lo que quería transmitir y que hiciera magia con las fotos. AsI que, sin pensarlo dos veces, acudí a la mujer que fue la fotógrafa en mi boda y ella aceptó llenita de ilusión trabajar para mi nuevo proyecto. Y yo…yo no podía sentirme más afortunada.
Y, llegados a este punto, en el que tenía las 4 piezas básicas (yo incluida como cabeza pensante) ahora tocaba montar el puzle. Y esto fue lo más difícil y os explico por qué.
LA QUE DIRIJE EL COTARRO ES UNA MUJER PERFECCIONISTA Y CON ANSIA VIVA + COVID19 Y SUS CORRESPONDIENTES RESTRICCIONES + 4 CABEZAS (NO UNA) TRABAJANDO SOBRE UNA MISMA IDEA = OH MAI GAT.
Pero salimos vivitos y coleando. Yo aprendí a escuchar y dejarme aconsejar por mi equipo. Y ellos entendían cuando les pedía que cambiaran esa “coma” porque sino sabían que esa noche soñaría con ella.
Ah, y qué decir de los Excels indescifrables de mi padre. Esos que no entendemos (al menos al completo) ninguno pero que han sido imprescindibles para que no se descuadre ni un decimal. Sí, esos. Porque mi padre es el rey de los números y del orden y yo, pues le quiero.
La verdad es que sin ellos la idea de mi proyecto seguiría viva en mi cabeza pero seguramente no me hubiera atrevido a lanzarme a hacerla realidad. Y me habría perdido tantas cosas….
- No hubiera conocido a personas muy especiales,
- No hubiera aprendido tantas cosas de mi padre (entre ellas, entender -medianamente-un Excel de high level)
- No me hubiera atrevido a exponerme en instagram y no me hubiera dejado de importar lo que pensaran los demás.
- No hubiera sabido la felicidad que produce cuando envías un paquetito a alguien desconocido y más aún cuando te dedican unas palabras bonitas al recibirlo.
- No hubiera sabido lo bien que te lo pasas haciendo un fucking Reel en Instagram y la rabia que da cuando queda mal (misma situación de Aliexprees -expectativa Vs realidad-)
- No hubiera empezado a escribir mi novela…
Así que le debo mucho a EME DE MAGIA. A ella y a todas vosotras. Porque Eme de Magia se alimenta de su público y vosotras sois las que la haréis crecer.
Esto acaba de empezar y estamos READY.
¿Me acompañáis en esta bonita locura?
